Periódico Chavense

104 años haciendo periodismo

miércoles 30 de abril del 2025

|

Compromiso colectivo

Movilizaciones y actos masivos marcan el 49º aniversario del golpe de Estado, en el Día de la Memoria

Haga clic en el botón una sola vez. Podría tardar unos segundos en reproducir dependiendo de la conexión a internet que disponga en el momento.

49 años después del golpe de Estado, las calles argentinas son escenario de marchas y actos conmemorativos, manteniendo viva la memoria histórica y la lucha por derechos humanos.

Hoy, 24 de marzo, Argentina conmemora el Día Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia, una fecha de profunda reflexión y homenaje a las víctimas del golpe de Estado de 1976 y de la dictadura cívico-militar que le siguió. Este año, al cumplirse 49 años de aquel oscuro capítulo de la historia del país, las calles de toda la nación se convierten en escenario de movilizaciones masivas y actos conmemorativos.

En Buenos Aires, la Plaza de Mayo, símbolo de resistencia y lucha, acoge una de las principales concentraciones. Diversas columnas de manifestantes han iniciado su recorrido desde la ex Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA), emblemático centro clandestino de detención y tortura, dirigiéndose por avenidas como Libertador y Santa Fe hacia el corazón de la capital. Participan organismos de derechos humanos, agrupaciones políticas, sindicatos y ciudadanos comprometidos, unidos en el rechazo al negacionismo y con la consigna «Nunca Más» como bandera.

En paralelo, ciudades de todo el país, como la vecina ciudad de Tres Arroyos, organizan sus propias actividades para recordar este día. En la Plaza de la Memoria de esta localidad bonaerense, vecinos y representantes de distintas instituciones se congregan para honrar a quienes fueron víctimas de la represión estatal. Las movilizaciones, actos y encuentros educativos buscan no solo mantener viva la memoria histórica, sino también reforzar el compromiso colectivo con la verdad y la justicia.

Este día es un testimonio de la capacidad de un pueblo para transformar el dolor en memoria activa y seguir luchando por un futuro donde los derechos humanos sean una prioridad inquebrantable.

Compartir esta nota en:

Otras notas

El Nuevo Heraldo logo

Contactate con nosotros